En una espectacular y virgen lengua de arena fina (Punta del Boquerón), en la que el avance de sus dunas ‘ahoga’ a pinos y matorrales, se esconde la Batería de Urrutia, una de esas fortificaciones militares que narran ese pasado, no tan lejano, de esta costa de asedios.
Medio oculta por la vegetación sobre la que asoman los merlones, su artillería, que compartió obligaciones con el Castillo de Sancti Petri, sirvió para defender el acceso a la Isla de León (San Fernando) a través del Caño de Sancti Petri.
Construida durante el siglo XVIII, se antoja como la mejor de las recompensas a un paseo por la playa de Camposoto, a lo largo de esa orilla que nos invita a descubrir la frontera terrenal del Parque Natural Bahía de Cádiz.