Sanlúcar de Barrameda

Con un entorno dibujado por el Atlántico, la desembocadura del Guadalquivir y el Coto de Doñana, los vinos de Sanlúcar de Barrameda son la máxima expresión de los ‘caldos marineros’. ¿Quién no ha oído hablar de la manzanilla?, ese vino blanco y seco, fruto de uvas palomino y acunado bajo ese delicado velo de flor.
Vino exclusivo de las bodegas sanluqueñas, es la cumbre de una cultura vitivinícola que se respira en las calles y plazas de la localidad y de la que te invitamos a empaparte visitando las bodegas Herederos de Argüeso, Barbadillo, Delgado Zuleta, La Cigarrera y, entre otras, La Gitana. Sin lugar a dudas, un placer para los sentidos.