Nexo de piedra ostionera sobre las aguas del Caño de Sancti Petri entre las vecinas localidades de San Fernando y Puerto Real, el puente Zuazo ha sido testigo privilegiado de parte importante, trascendental, de la historia de este territorio de contiendas y libertades.
Basta decir que sus orígenes viajan a la dominación romana (14 años de J.C.), siendo sus cimientos parte de aquel acueducto que, desde El Tempul, surtía de agua potable a la trimilenaria Gades.
Parte destacada del escudo de San Fernando (antigua Isla de León) y defendido por baterías de artillería, presenta un excelente estado de conservación, siendo un balcón destacado de ese laberinto de marismas que es el Parque Natural Bahía de Cádiz.
Su importancia como vía de comunicación fue tal que hasta 1969, año en que se abrió el Puente Carranza (entre Cádiz y Matagorda, Puerto Real), fue la única vía de comunicación entre las ‘islas gaditanas’ y el resto del continente.