Localizado en la Sierra de la Plata, se antoja uno de las más destacadas atalayas de la costa de Cádiz. De orígenes presumiblemente púnico o púnico-turdetano, su construcción pudo tener como objeto servir de refugio fortificado y dominar los campos de cultivo.
A ella nos conduce un sendero estrecho y en cuesta. Resulta todo un espectáculo las vistas que nos regala de la Bahía de Tánger, la ensenada de Bolonia y la plataforma litoral de Zahara de los Atunes.
Como se suele decir, el esfuerzo vale, y mucho, la pena.
CÓMO LLEGAR: En la N-340 a la altura del Km 71, tomar la carretera CA-8202 a Bolonia. Desde la carretera de Bolonia en dirección a los senderos y miradores, girar a la derecha a unos 2,5 Km donde parte un camino asfaltado en mal estado.