No muy extensa ni ancha y con arena oscura con presencia de restos de conchas, el Chinarral se caracteriza por la laja (plataforma rocosa) que la perfila y en la que se cuelan algunos claros arenosos.
A los pies de chalets, en ella, en sus extremos, se localizan pequeñas calas y alguno de esos búnkeres que, con motivo de la Segunda Guerra Mundial, se construyeron a lo largo del litoral gaditano.
Debido a sus limitaciones, no es muy visitada, si bien quienes se acercan a su orilla disfrutan de envidiables vistas del Peñón de Gibraltar y del continente africano.

