Si hay una playa que no exista otra forma de definirla que de espectacular, esa, sin lugar a dudas, es Punta Paloma. Y es que toparnos con ella es como abrir una de las puertas de ese paraíso con el que todos hemos soñado alguna vez.
Anclada a una enorme duna de arena dorada y fina, se antoja uno de los rincones más idílicos de cuantos existen en la costa de Cádiz; uno de esos paisajes que te atrapan para y por siempre.
Mundialmente conocida para la práctica del kitesurf y windsurf, entre sus peculiaridades destaca la existencia de una zona de fango en el tramo al que se accede por el camino militar. A esta zona de fango acuden numerosas personas para ponérselo por todo el cuerpo. Algunas fuentes aseguran que estos fangos son buenos para la salud.
ES… lo más parecido al paraíso