Son ´solo’ eso langostinos, ¡pero qué langostinos! Langostinos de Sanlúcar de Barrameda, de esta tierra de mágica confluencia de aguas saladas y dulces, donde dicen estudios científicos tiene su origen un producto que nada tiene que ver con el resto de sus ‘parientes’.
Un producto de apariencia diferente, con espectaculares tonos azules en la cola, pero, sobre todo, infinitamente diferente en sabor y textura. Como se suele decir: a años luz del resto de langostinos.
Con distintivo propio, su elaboración es tan simple como acertada: se hierven y seguidamente se enfrían en una salmuera de sal, hielo y agua.